La Carta de Derechos Digitales, que prepara el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, debe garantizar la infoinclusión de las personas con discapacidad atajando las brechas de accesibilidad y económica, y minimizando los sesgos tecnológicos que castigan a la diversidad humana y social.
Así lo ha planteado el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) en la reunión mantenida hoy con responsables de la Secretaría de Estado de Digitalización y Agenda Digital, que está manteniendo encuentros con los grupos de interés que han realizado aportaciones al borrador de Carta de Derechos Digitales promovido por este Ministerio y sometido a consulta pública meses pasados.
Para el CERMI, la digitalización no será posible sin asegurar el presupuesto previo de la accesibilidad universal y el diseño para todas las personas de los entornos tecnológicos, que es la puerta de entrada para las personas con discapacidad y mayores. Además de la brecha de accesibilidad, hay que atajar la brecha económica, con medidas de acción positiva y con intervenciones públicas que hagan asequibles para la generalidad de la población los bienes y servicios digitales.
Otra dimensión de la máxima relevancia que la Carta de Derechos Digitales debe preservar, según el CERMI, es la neutralidad efectiva de la inteligencia artificial, de los algoritmos y de la gestión masiva de datos, que han de configurarse para que respondan con fidelidad a la diversidad humana y social, sin sesgos ni estandarizaciones que oculten a los grupos sociales diferenciados y a las minorías.